Buscar en la Web:

Búsqueda personalizada

Punto y Aparte

Por: El Grillo

Partiendo del punto de vista personal, analizando perspectivas funcionales y efectos que pudiese causar el nombramiento de Fernando Gómez Mont como secretario de Gobernación, menciono en primer término que es sorprendente, el presidente Calderón les dio una lección a todos los futurólogos, de lo que esta repleto este país. El segundo aspecto importante sobre esta decisión, el presidente trae un personaje muy atractivo para su tarea, una persona muy conocida y respetada por la clase política, de Gómez Mont no se burlará Beltrones, no se mofará el PRD, no lo van a chamaquear.

Fernando Gómez Mont es un abogado penalista respetado, temido por muchos, duro, de ahí, a que realmente sea el Secretario de Gobernación adecuado para este momento, es aventurado decirlo. Si se revisa su trayectoria no llegaríamos a encontrar un bajo perfil, sin dejar de lado que ya vio operar como secretario a Francisco Ramírez Acuña, a Mouriño; es decir, ya tiene un panorama claro acerca de cómo se ve la Secretaría desde fuera, sus debilidades y fortalezas.

Cabe mencionar que Gómez Mont no llega al cargo derivado de un acto de gratitud como pasó con Ramírez Acuña, no viene de una relación de Cercanía, de amistad o confianza absoluta como el desaparecido Juan Camilo Mouriño. Viene fuerte por que no llega tampoco del grupo de amigos dentro del PAN, sólo se adjudica que sabe de política interior, sabe de seguridad, que son razones suficientes para ocupar el cargo.

Evaluando esta visión sobre los hechos, podemos decir que el perfil ahí esta. Puede y tiene la capacidad de llevar a los legisladores temas indispensables, puede conseguir acuerdos parlamentarios, influir o presionar a los gobernadores y si puede ayudar a disipar los plantones como el que se encuentra frente a Secretaría de Gobernación, donde nadie mete las manos, sería un éxito.

Más que herramientas para trabajar de manera eficiente, esto es un asunto de voluntad y de capacidad, ser capaz de tomar decisiones sin cuidarse de una sucesión. Creo que es un litigante duro, que tomará con entereza, con frialdad los temas que deban ser resueltos en el accionar del gobierno del presidente Calderón, sencillamente dirá y hará lo que crea necesario decir y hacer, en función de la rectitud y cierto grado de objetividad.

El tiempo será quien tenga la última palabra acerca de que si fue o no un buen funcionario publico, de la talla de la Secretaría de Gobernación. Como dijo un personaje muy inteligente “Por sus frutos los conoceréis”, “Esperanza es decidir triunfar en cada circunstancia que nos toca vivir”.

No hay comentarios: