Por: El Grillo
Operación limpieza, aporta datos
Antes de entrar en terrenos de la llamada operación limpieza que se lleva a cabo en dependencias gubernamentales, quisiera apuntar algo grave, los ministerios públicos del DF resultaron reprobados. El cincuenta y uno por ciento del personal que labora en el ministerio público desde secretarias, auxiliares y los propios agentes no pudieron acreditar los exámenes sobre derechos humanos, ni siquiera aprobaron lo elemental para ministerios públicos, derecho penal. ¿Cómo andarán los que se encuentran cerca de nosotros?
Entrando en tema la operación limpieza llegó hasta Noé Ramírez Mandujano, quien fuera titular de la Sub procuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO). A este funcionario se le descubrió que recibía de parte del crimen organizado la módica cantidad de Cuatrocientos cincuenta mil dórales mensuales. Con él se arraigaron a sus subordinados, el coordinador de la SIEDO Fernando Rivera Hernández y su homólogo Miguel Ángel Colorado González. Así como también la detención del director de Interpol México, Ricardo Gutiérrez Vargas, a las que se suman otras 6 detenciones entre agentes federales y altos mandos en dependencias gubernamentales.
Por lo que arrojan los primeros resultados de este operativo, nos lleva a la confirmación de lo que todos conocemos, el grado de corrupción con que actúan los delincuentes y a lo que todos estamos expuestos a sufrir, la impunidad. Me sumo a la propuesta que hace el Presidente de la república, que esta operación se extienda a las dependencias de los estados y municipios, incluso otros poderes como el poder judicial que buena falta que hace.
Resalta algo evidente en todo este movimiento y me refiero a los mencionados controles de confianza que se llevan a cabo en la PFP, los exámenes que nos han vendido desde que existe la Agencia Federal de Investigaciones. Para muestra las detenciones que ya mencione anteriormente, esos seudo funcionarios hacían declaraciones patrimoniales, compra de casas, autos y no hubo un filtro que lo detuviera. La delincuencia se internó en la Procuraduría, en la Policía Federal y otras organizaciones, pero se rescata que aún existen personas capaces de investigar estos actos delictivos dentro de las mismas dependencias.
El crimen organizado tiene la capacidad de corrupción e intimidación de autoridades, esta en una red de complicidad que implican a funcionarios y desde luego a agentes policiales. Sin duda bebe haber jueces o magistrados vinculados en estos actos, tal vez intimidados o presionados por los criminales, por tal razón creo que debe ser intervenido el poder judicial. La operación tiene por supuesto sus claro oscuros, sin embargo es importante que se este realizando debido a que no se puede estar combatiendo al enemigo, en la guerra contra la delincuencia teniendo el enemigo dentro.
Aunque se debe tener mucho cuidado con estos arraigos, puede ser una estrategia del crimen organizado para remover a funcionarios e implementar un nuevo sistema de corrupción. No bastaría entonces con señalar, debe hacerse la investigación profunda, una averiguación previa. ¿Dónde esta el dinero que pudieron recibir? ¿Desde cuándo llevan a cabo estas acciones ilícitas y cuál es la fuente de denuncia?
Si bien es cierto es difícil llegar a un suelo de más de cuatrocientos mil dólares mensuales para poder argumentar que no deben corromperse los funcionarios, pero si existen controles de confianza que se pueden implementar de manera más exhaustiva y rigurosa, así como exámenes continuos, declaraciones patrimoniales constantes que pueden impedir que sean sujetos corrompibles.
En verdad que estamos en plena batalla contra nuestra errónea filosofía como país corrupto e impune, que muchos ciudadanos comunes han alimentado desde una mordida por infracción vial hasta tramites burocraticos. Como dice un spot televisivo: “ahora das una mordida, mañana pagarás un rescate”. Reflexione antes de actuar, las consecuencias de no hacerlo pueden ser muy graves.
Entrando en tema la operación limpieza llegó hasta Noé Ramírez Mandujano, quien fuera titular de la Sub procuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO). A este funcionario se le descubrió que recibía de parte del crimen organizado la módica cantidad de Cuatrocientos cincuenta mil dórales mensuales. Con él se arraigaron a sus subordinados, el coordinador de la SIEDO Fernando Rivera Hernández y su homólogo Miguel Ángel Colorado González. Así como también la detención del director de Interpol México, Ricardo Gutiérrez Vargas, a las que se suman otras 6 detenciones entre agentes federales y altos mandos en dependencias gubernamentales.
Por lo que arrojan los primeros resultados de este operativo, nos lleva a la confirmación de lo que todos conocemos, el grado de corrupción con que actúan los delincuentes y a lo que todos estamos expuestos a sufrir, la impunidad. Me sumo a la propuesta que hace el Presidente de la república, que esta operación se extienda a las dependencias de los estados y municipios, incluso otros poderes como el poder judicial que buena falta que hace.
Resalta algo evidente en todo este movimiento y me refiero a los mencionados controles de confianza que se llevan a cabo en la PFP, los exámenes que nos han vendido desde que existe la Agencia Federal de Investigaciones. Para muestra las detenciones que ya mencione anteriormente, esos seudo funcionarios hacían declaraciones patrimoniales, compra de casas, autos y no hubo un filtro que lo detuviera. La delincuencia se internó en la Procuraduría, en la Policía Federal y otras organizaciones, pero se rescata que aún existen personas capaces de investigar estos actos delictivos dentro de las mismas dependencias.
El crimen organizado tiene la capacidad de corrupción e intimidación de autoridades, esta en una red de complicidad que implican a funcionarios y desde luego a agentes policiales. Sin duda bebe haber jueces o magistrados vinculados en estos actos, tal vez intimidados o presionados por los criminales, por tal razón creo que debe ser intervenido el poder judicial. La operación tiene por supuesto sus claro oscuros, sin embargo es importante que se este realizando debido a que no se puede estar combatiendo al enemigo, en la guerra contra la delincuencia teniendo el enemigo dentro.
Aunque se debe tener mucho cuidado con estos arraigos, puede ser una estrategia del crimen organizado para remover a funcionarios e implementar un nuevo sistema de corrupción. No bastaría entonces con señalar, debe hacerse la investigación profunda, una averiguación previa. ¿Dónde esta el dinero que pudieron recibir? ¿Desde cuándo llevan a cabo estas acciones ilícitas y cuál es la fuente de denuncia?
Si bien es cierto es difícil llegar a un suelo de más de cuatrocientos mil dólares mensuales para poder argumentar que no deben corromperse los funcionarios, pero si existen controles de confianza que se pueden implementar de manera más exhaustiva y rigurosa, así como exámenes continuos, declaraciones patrimoniales constantes que pueden impedir que sean sujetos corrompibles.
En verdad que estamos en plena batalla contra nuestra errónea filosofía como país corrupto e impune, que muchos ciudadanos comunes han alimentado desde una mordida por infracción vial hasta tramites burocraticos. Como dice un spot televisivo: “ahora das una mordida, mañana pagarás un rescate”. Reflexione antes de actuar, las consecuencias de no hacerlo pueden ser muy graves.
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